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Del 27 al 2 de Diciembre
Dormir y descansar bien por la noche son dos de los factores más importantes para mantener una buena salud tanto física como mental. Para ello, es fundamental tener un colchón que se adapte a nuestras necesidades y que nos aporte la comodidad necesaria para relajarnos.
Una de las dudas más comunes está relacionada con la durabilidad de los colchones o con el momento en que es oportuno renovarlo. Los expertos aconsejamos que, los colchones deben reemplazarse después de los 8 a 10 años de uso.
De igual forma, hay varias señales de carácter general que se pueden tener en cuenta para tomar la decisión de realizar el cambio:
En el mercado se encuentran varias categorías de colchón: los colchones de muelles o resortes, los colchones de látex y los colchones de espuma. Son precisamente estos últimos los que presentan unas características muy interesantes y en los cuales vamos a indagar a continuación.
Existen diferentes tipos de espuma y distintas opciones de densidad. En Espuma a medida ofrecemos diferentes tipos de colchones según lo que necesites.
Estas son algunas de las ventajas de escoger un colchón de espuma:
La vida útil de un colchón de espuma depende, en gran medida, del tipo de espuma que se emplee en el núcleo.
Si buscas un colchón de grandes prestaciones, gran calidad y alta durabilidad, te aconsejamos siempre que esté fabricado con espuma de alta resiliencia.
A su vez, también hay que pensar en la densidad de la espuma que se emplea en el colchón.
La densidad refleja la cantidad de material empleado para fabricar un metro cúbico de dicha espuma; su unidad de medida es en kilogramos por metro cúbico (kg/m3). A continuación, exponemos cómo clasificar las espumas según su densidad:
- Entre 18 y 20 kg/m3: se considera de densidad baja. Ideal para colchones infantiles
- Entre 25- 30 kg/m3: se considera densidad medida alta. Perfecto para colchones de adultos de peso medio. Se aconseja una capa de vsicoelástica.
- A partir de los 30 kg/m3: se considera de densidad muy alta. Se utiliza cuando se quiere dormir sobre un colchón muy firme, cuando el colchon es muy fino, o cuando el durmiente tiene un elevado peso. Es muy importante añadir viscolástica ya que la alta densidad conlleva una muy alta firmeza.
La densidad va directamente relacionada con el grosor. Ten en cuenta esta regla: A poco grosor, alta densidad. A mayor grosor, densidad media o baja.
La explicación es muy sencilla, si eliges un colchón de 10cm de grosor y una espuma muy suave de 20kgs/m3, con el uso enseguida notarás la base sobre la que apoya el colchón. En este caso, debería elegir una espuma de densidad superior.
Para simplificar y resumir, al valorar la vida útil de un colchón de espuma debes tener en cuenta:
- El uso que le vas a dar.
- El peso de las personas que lo van a utilizar.
- La calidad de las espumas empleadas.
- La relación densidad- grosor del colchón.
Por otro lado, también es recomendable que se sigan algunos consejos para su cuidado:
- Utilizarlo con una base tapizada transpirable
- Girarlo por lo menos una vez al mes (poner los pies en la cabeza y la cabeza en los pies). No lo voltees nunca si lleva diferentes capas de espuma, sobre todo si lleva viscolástica porque esta quedaría debajo y perdería las propiedades de uso del colchón.
- Limpiarlo con frecuencia
- Ser precavido para no mancharlo
Para terminar, recuerda que realizando tu compra con nosotros podrás elegir entre varios modelos, y a su vez, podrás indicar si prefieres que sea estándar o hecho a medida, si quieres añadir una capa de viscoelástica y / o de thermo-gel, y / o si quieres añadir una funda a medida también.
Aunque parezca complicado, tenemos un Equipo de Asesores Comerciales experto en espumas que te aconsejará la opción más adecuada para tus necesidades. Confía en nosotros.